Mejora tu Sistema Inmunológico
Nuestro organismo cuenta con sus propios mecanismos de defensa, pero cuando no está en equilibrio, el sistema inmunológico puede fallar, dando lugar a inflamaciones, infecciones u otras alteraciones. Este sistema fabrica anticuerpos para protegernos de bacterias, virus y alérgenos, produciendo diferentes tipos de inmunoglobulinas que combaten agentes patógenos externos e internos.
Para mantener nuestro sistema en equilibrio, es fundamental llevar una alimentación saludable y lo menos procesada posible, desde su cultivo hasta su cocción. Así, podemos aprovechar al máximo los nutrientes que nos aportan los alimentos.
Desafortunadamente, en la actualidad podemos encontrar prácticamente cualquier alimento en cualquier época del año, aunque no sea su temporada natural de cultivo. Esto ha generado una alimentación más pobre en nutrientes esenciales como vitaminas y minerales. Aunque visualmente estos productos pueden parecer atractivos y de gran tamaño, su valor nutritivo suele ser bajo.
Además, debemos tener en cuenta la presencia de disruptores endocrinos, sustancias químicas que pueden alterar nuestro sistema hormonal y que están presentes en algunos alimentos como verduras, pescados y hasta en el agua. Sin embargo, este es un tema que trataremos en otra ocasión.
Alimentos que fortalecen el sistema inmune
La medicina natural nos ofrece una gran variedad de alimentos que pueden ayudarnos a reforzar nuestras defensas y prevenir enfermedades. Algunos de los más destacados son:
Setas medicinales
Los hongos como el Reishi, Shiitake y Maitake son conocidos por su capacidad para fortalecer el sistema inmunológico.
En cuanto a minerales, las setas son una excelente fuente de cobre, que ayuda a reforzar las defensas y combatir la inflamación. También contienen antioxidantes como selenio, manganeso y zinc, además de aportar hierro, magnesio, fósforo y potasio en menor medida.
Equinácea
Esta planta tiene propiedades inmunoprotectoras que favorecen la respuesta inmunológica del organismo.
Zinc
Un mineral clave para el buen funcionamiento del sistema inmunológico y la regeneración celular.
Vitamina D3
Cada vez es más común la deficiencia de vitamina D3, principalmente debido a la falta de exposición solar.
En países con inviernos fríos, como el nuestro, la luz solar en esta estación no es suficiente para cubrir nuestras necesidades de vitamina D. Sin embargo, en verano sí lo es. Se recomienda aprovechar las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde para tomar el sol sin protector solar, evitando las horas de mayor radiación (a partir de las 12 del mediodía). En esos momentos, es fundamental aplicar un protector con factor 50 para evitar daños en la piel.
La vitamina D3 es esencial no solo para la salud ósea, sino también para el bienestar emocional.
Cristina Arumí
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